Mateo de 9 años, casi pierde el ojo por quemar cohetes; ocurrió en el sur de Veracruz

Coatzacoalcos, Ver. – Mateo, un menor de nueve años sufrió quemaduras en el ojo izquierdo, consecuencia de haber manipulado pirotecnia en su hogar, ubicado en el municipio de Jáltipan, al sur de Veracruz. El niño fue trasladado a Coatzacoalcos, donde un oftalmólogo logró atenderlo a tiempo y evito que perdiera el ojo.

Información obtenida por La silla rota, indica que Mateo se encontraba manipulando un cohete y en un descuido le exploto en el rostro, provocando lesiones en su ojo izquierdo.

El niño fue llevado por sus padres al hospital de Jáltipan, donde solicitaron su traslado al Hospital IMSS Bienestar de Coatzacoalcos, donde fue atendido por el cirujano oftalmólogo Carlos Gordillo. Ahí se indicó que no se afectó el glóbulo ocular, por lo que con medicamento se sanará la quemadura.

“El doctor Carlos Gordillo, especialista en oftalmología, valoró al pequeño Mateo y afortunadamente no tiene consecuencias de gravedad en los ojos. El niño tuvo quemaduras por la manipulación de cohetes y deberá guardar reposo y seguir su tratamiento”, informó Xóchitl Mortera, presidenta de la fundación Te Queremos Ayudar.

El caso de Mateo, es el primero que se registra en el sur del estado de Veracruz.

Exhortan a padres a no dejar que sus hijos manipulen cohetes o pirotecnia

Tanto la fundación que preside Xóchitl Mortera, como Protección Civil, han exhortado a los padres de familia a no permitir que sus hijos jueguen con pirotecnia o cohetes en esta temporada decembrina, advirtiendo que se pueden tener es tipo de consecuencia lamentables.

El director de Protección Civil de Coatzacoalcos, David Esponda Cruz, reiteró que de preferencia no dejen a los niños manipular pirotecnia, aunque si lo hacen deben tomar en cuenta lo siguiente:

“Recomendamos que nunca dejen solo a un menor con cohetes en ningún caso, porque por muy pequeños que sean siempre representan un riesgo, que haya un adulto responsable que se los proporcione, que los ayude a quemarlos, que no los usen al interior de la casa, que no los traigan en la bolsa de los pantalones, que no les den cerillos, velas o productos para encenderlos; y que no los usen con botes o latas y si un cohete no explota que no intenten agarrarlo de nuevo”, precisó.